Pablo: aficionado a la fotografía, sabedor del lenguaje nipón, fluido as del inglés, diseñador web mediocre, y funcionario público, crítico del funcionariado público.
En otro tiempo hubiese sido un gaucho malo, no cabe duda. Todo lo indica. Su rostro desalineado y cuadrado, su bermuda raida oliveña, su afición por el hentai. Sin duda, de aquellos tipos que al entrar a una pulpería hubiesen tendido un manto de silencio sobre los parroquianos, y con voz de rienda firme dicho:
"Do' limeta pa' cá, que de tanto jinetiar andamo má' rápido que chaguarazo pa' apedarno"
Se... ese es Pablo. Una bestia asesina, más capaz de empedrar a cualquiera que una gorgona.
(No confíen en Pablo)
lunes, 31 de diciembre de 2007